El maíz es uno de los cultivos más importantes en México, tanto por su valor económico como por su relevancia cultural y alimentaria. Sin embargo, su producción se enfrenta a diversos retos, como la escasez de agua, la degradación del suelo y el cambio climático. Para hacer frente a estas adversidades, los productores de maíz en el estado de Chihuahua han encontrado en Rooting G, un enraizador de última generación, una solución eficaz y rentable.
Rooting G es un producto desarrollado por la empresa Agroenzymas, líder en el mercado de bioestimulantes y fertilizantes orgánicos. Se trata de un arrancador en estado sólido que estimula el desarrollo de nuevas raíces en las plantas de maíz, lo que les permite absorber mejor el agua y los nutrientes del suelo, así como resistir mejor el estrés hídrico y las plagas12.
Su formulación granulada de lenta liberación hace que permanezca cerca de la semilla hasta que existan las condiciones de humedad necesarias para desencadenar su efecto, superando así las posibles condiciones ambientales adversas del suelo12. Además, su amplio rango de seguridad no genera residuos ni afecta la calidad del grano2.
Según testimonios de los agricultores que han utilizado Rooting G, este fertilizante ha incrementado el rendimiento y la rentabilidad de sus cosechas de maíz, al reducir los costos de producción y mejorar la calidad del producto.
Algunos de los beneficios reportados son:
- Mayor germinación y emergencia de las plántulas.
- Mayor vigor y crecimiento de las plantas.
- Mayor número de mazorcas y granos por planta.
- Mayor peso y tamaño de los granos.
- Menor incidencia de enfermedades y plagas.
Rooting G es un enraizador que se adapta a las diferentes condiciones agroclimáticas y tipos de suelo de Chihuahua, y que se puede aplicar tanto en maíz de temporal como de riego, en diferentes dosis según las necesidades del cultivo. Su uso es compatible con otros productos y prácticas agronómicas, como la fertilización química, la rotación de cultivos y el control biológico2.
Rooting G es, sin duda, una herramienta innovadora y sustentable que contribuye al desarrollo del sector agropecuario de Chihuahua, y que ofrece a los productores de maíz una alternativa para mejorar su competitividad y garantizar la seguridad alimentaria de la región y del país.